Los jugadores que esperan con ansias el nuevo NES Mini, oficialmente conocido como NES Classic Edition, ya han podido ver lo que oculta debajo de su carcasa gracias a que el editor del sitio GameSpot, Peter Brown, publicó una foto de su circuitería interna.
Y al parecer, los fans que esperaban poder hackear la pequeña consola no tendrán mucha suerte, ya que el diseño de ésta probablemente evitará cualquier intento de softmodding, es decir, la modificación del comportamiento del hardware por medio de software.
Como era de esperarse, el NES Mini no comparte ningún hardware en común con su predecesor, el NES original. En su lugar, Nintendo optó por entregar juegos por medio de emulación y la configuración interna del dispositivo favorece la simplicidad, limitando las opciones disponibles para los modders amateur de la consola.
Unless you want to desolder flash memory from the motherboard, looks like it’s impossible to add new games to NES Classic. pic.twitter.com/jc99WSrNJj
— Peter Brown (@PCBrown) 2 de noviembre de 2016
El NES Mini almacena su software de emulación y los juegos en un chip de memoria flash, lo que hace difícil (si no es que imposible) modificar el sistema sin romperlo físicamente y acabando con la garantía en el proceso.
Los entusiastas de modificación de consolas esperaban que el pequeño dispositivo fuera tan fácil de hackear al igual que el Wii y el Wii U. Los hackers pudieron modificar ambos sistemas por medio de software, lo que permitió a los usuarios otorgarles características adicionales por medio de soporte homebrew, como el poder correr título de otra región.
Es por ello que es poco probable que veamos alguna modificación al NES Mini, pero lo que sí es un hecho es que la consola llegará el próximo 11 de noviembre a Estados Unidos por un precio de 60 dólares.
En el caso de México, aún se desconoce el precio oficial que tendrá, pero se especula que rondará los 2,000 pesos gracias a una fotografía de un anuncio por parte de Best Buy México que pudimos conseguir.
Vía unocero