La impresión de extremidades con tecnología 3D, la democratización de los medios y la llegada de las tecnologías de información y comunicación a las escuelas son algunos de los beneficios de la tecnología.
Sin embargo, los avances tecnológicos también acarrean desventajas, y no es una situación nueva.
La Revolución Industrial, que se vivió a finales del siglo XVIII y principios del Siglo XIX dejó a miles de personas sin empleo, pues los procesos de automatización, producción en masa y la introducción de los procesos industriales en las fábricas reemplazó en gran medida el trabajo manual por el de las máquinas.
Aislamiento social y ciberdelincuencia
Además de los problemas de salud asociados con las tecnologías, aislamiento social es uno de los efectos de los “usos compulsivos” de redes sociales, teléfonos inteligentes y otros productos y servicios tecnológicos.
Las recompensas emocionales que representan a un usuario de redes sociales recibir “me gusta” en sus publicaciones es en algunos casos adictiva, lo que propicia su dependencia y paradójicamente, un aislamiento social en un mundo tan conectado, lo que constituye para muchos una de las grandes desventajas de la tecnología.
Por su parte, la ciberdelicuencia afecta a más de 431 millones de personas alrededor del mundo, estima la Organización de las Naciones Unidas.
El delito cibernético se presenta a través de variantes como el phising, que roba los datos personales de los usuarios de Internet, el malware y los virus informáticos, o el hacking, en el que piratas informáticos acceden de forma remota a las computadoras personales o teléfonos celulares.
Obsolescencia programada
Compras un nuevo teléfono inteligente. Flamante, es el último modelo que ha salido al mercado. Su cámara, pantalla y sistema operativo representan lo más novedoso e impactante de la tecnología móvil. Sin embargo, menos de un año después la empresa lanza un nuevo equipo, aún más poderoso que el tuyo y desde luego, quiere que lo compres.
Tu precioso smartphone ya es obsoleto, y en pocos meses, ya no recibirá actualizaciones de software.
De eso se trata la obsolescencia programada. Ocurre en peores situaciones, por ejemplo, cuando una impresora aparentemente en buen estado decide dejar de imprimir y entonces debes comprar una nueva porque es más barato que repararla. Reducir la vida útil de los productos o renovar constantemente su catálogo son algunos de los métodos que utiliza.
Pérdida de empleo
Carteros, agentes de viajes, meseros, agentes de telemarketing y hasta reporteros de medios impresos viven sus últimos años, pues son empleos en peligro de extinción, según la agencia analista laboral CareerCast. Aplicaciones como Uber han puesto a temblar a los taxistas y plataformas como Despegar están reemplazando a las agencias de viajes.
“Nuestras máquinas han empezado a mostrar habilidades que nunca antes habían mostrado: entienden, hablan, escuchan, ven, responden, escriben… y no dejan de adquirir nuevas. Estamos creando un mundo donde va a haber más y más tecnología y menos y menos trabajos”, dijo Andrew McAfee en una conferenciab TED.
Brecha digital
No todos los países son ricos, o al menos no desde el punto de vista de la riqueza en dinero como la ve el capitalismo.
La brecha digital es “la separación que existe entre las personas que utilizan las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) como una parte rutinaria de su vida diaria y aquellas que no tienen acceso a las mismas y aunque las tengan no saben cómo utilizarlas”, define el académico Arturo Serrano en su libro La Brecha Digital: Mitos y Realidades.
En pleno 2015, y según información de la Unión Internacional de Telecomunicaciones, un organismo de la ONU, la penetración a Internet no llega al 34% en los países en vías en desarrollo, muchos de Latinoamérica incluidos.
En las naciones subdesarrolladas, menos 7% de los hogares tiene acceso a Internet. El promedio mundial es de 46%, lo que significa que más de la mitad de la población mundial no conoce Internet.
Problemas de salud
Las malas posturas, los movimientos repetitivos y pasar mucho tiempo sentado son algunas de las situaciones que provocan problemas de salud y que están asociadas al uso de la tecnología. Los casos de síndrome del túnel carpiano, una enfermedad que puede ser incapacitante para las manos, se han disparado en los últimos años debido al uso del mouse y teclado por muchas horas.
Una afección conocida como text neck o cuello de texto ataca a las personas que pasan largo tiempo con el cuello agachado mientras utilizan su celular, y si pasas mucho tiempo sentado –frente a la computadora o viendo televisión- estarás condenado a sufrir enfermedades del corazón, columna y páncreas, o incluso a desarrollar obesidad y cáncer.
Los problemas de salud como consecuencia de la tecnología también pueden llegar a través de la exposición a las radiaciones de grandes antenas de telecomunicaciones, situación que ha incrementado la incidencia de cáncer, principalmente en niños, en ciudades como Guadalajara, México.
La contaminación generada por las industrias que emplean tecnología, y la basura generada por la obsolescencia programada también ocasionan problemas de salud.
Pérdida de habilidades tradicionales
“La gente cada vez escribe menos a mano, y con peor letra”, reza el titular de un artículo en el periódico argentino “La Nación”, publicado en 2012. En Finlandia, país que se toma de ejemplo por su modelo educativo, han decidido dejar de enseñar la escritura a mano caligráfica a partir de 2016.
“No es novedad que en el siglo XIV era más importante hacer aritméticas mentales o en papel que en la actualidad”, razona por su parte la UNESCO en su estudio Las TIC y la Comunicación en la Enseñanza.“Actualmente todas las personas que hacen cálculos a nivel profesional utilizan una calculadora”.
Este organismo señala que las “prioridades de la educación” han cambiado, lo que ha significado añadir nuevas prioridades, como la computación y la programación a más temprana edad, y “dejar de lado otras”, como cada vez sucede más con la aritmética en papel y la escritura a mano.
Una situación que, no obstante, se cuestionan investigadoras como Karin James, de la Universidad de Bloomington, en Estados Unidos, que descubrió un retraso en el desarrollo de las habilidades motrices y cognitivas de los niños que aprenden tardíamente a escribir a mano.
Acceso ilimitado a la información
“El advenimiento de las TIC ha fomentado, en algunos lugares, un consumo más pasivo de la información, principalmente en forma visual, lo cual es comparable con la pasividad de mirar televisión”, dice la UNESCO.
“Internet brinda la oportunidad de publicar cualquier tipo de material y de acceder a esas publicaciones sin el menor control. Además, permite a los niños acceder a pornografía y a drogas, y también facilita el contacto con abusadores infantiles que se presentan como amigos virtuales”, destaca la organización.
El gran acervo de información de Internet es un arma de dos filos. Hay una “producción masiva de textos de baja calidad” que terminan por abrumar a los usuarios y además, desinformándolos. ¿La solución? “combinación de restricciones tecnológicas y controles junto con los principios morales, las tradiciones y la cultura”, propone la UNESCO.
Vía: Geekpunto